En esta cuaresma, nuestros amigos de Emaús van a realizar un camino para encontrarse con Jesús e intentar vivir como cristianos. Para viajar vamos a preparar nuestra mochila, quitaremos todo aquello que no necesitamos y nos impide caminar e iremos metiendo a lo largo de esta cuaresma esos valores que nos ayudan a amar como Jesús no ama. La señal de salida es el Y así con esta idea comenzamos la Cuaresma. EN MARCHA En mi mochila he colocado tu Palabra. Dios me habla cada día. ¿Por qué no darme tiempo para escucharlo? Cuando abro el libro de la Palabra es como si abriera una puerta. Y una puerta que se abre es una invitación. Dios me dice: “Acoge mi Palabra, Acepta mi Amistad, Entra en el Silencio, ¡Entra y comparte!” |