Cuando llegamos a la granja escuela nos esperaba Isabel con “Moreneta” (una burrita, que nos dio un paseo para conocer la granja), luego almorzamos, hicimos pan, dimos un paseo por la montaña de las hierbas aromáticas, visitamos el huerto y conocimos a todos los animales. Una vez hecho todo esto, necesitábamos coger fuerzas porque habíamos gastado toda nuestra energía y llegó la hora de comer. Los macarrones y las salchichas nos dieron mucha fuerza pero aun así necesitábamos descansar para poder continuar. Por la tarde, tuvimos una gran sorpresa: Nos visitó nuestra gran amiga “Cirereta”, con la que viajamos a un mundo maravilloso y nos llenamos de la magia del amor.

Llegada la hora de regreso, con mucha tristeza nos despedimos de todos y regresamos al cole con el autobús.